"Se cortó Internet".
"Trabajar en algunos momentos del día se hace muy
difícil, la conexión está lentísima, va y viene, hay que estar atentos".
Estas expresiones, que entremezclan incertidumbre y malestar, se han vuelto una
constante en los últimos meses.
Y no hacen más que explicitar cómo, desde 2012 a esta parte,
en la Argentina el servicio de conectividad se ha ido deteriorando en forma
paulatina.
Al momento de explicar las causas de los microcortes o las
prolongadas interrupciones que afectan a particulares y empresas, expertos del
sector hacen referencia a un combo de factores.
En primer lugar, dan cuenta de un incremento exponencial en
la demanda del servicio -que satura la capacidad instalada- combinado con
inversiones insuficientes de las compañías para poder hacer frente a la mayor
cantidad de requerimientos.
Este escenario se da en medio de un contexto de alta
incertidumbre, fuerte injerencia estatal sobre las empresas y políticas gubernamentales
muy restrictivas, que se evidencia en el clima poco favorable para los
negocios.
"Las responsabilidades son compartidas. Por el lado del
Gobierno, pasaron diez años en los que la Secretaría de Comunicaciones (Secom)
no hizo prácticamente nada. Por el lado de la firmas, el temor que les generan
los cambios en las reglas de juego hace que inviertan lo justo y necesario,
frente a una demanda que no para de crecer", afirmó a iProfesional
Alejandro Prince, titular de Prince Consulting.
Cautela empresaria
Un actor clave en lo que hace al servicio de conectividad es
Cablevisión y Fibertel. Y no se puede hablar de estas compañías sin hacer
referencia al enfrentamiento que mantiene el Grupo Clarín con el Gobierno.
La "artillería pesada" que ha descargado la
administración K -cepo publicitario incluido- ha impactado de lleno en las
finanzas del mencionado grupo, de modo tal que en este último tiempo se ha
limitado a invertir sólo para el mantenimiento de lo ya instalado, sin haber
avanzado en ampliaciones o en fuertes mejoras.
Desde Carrier & Asociados su titular, Enrique Carrier,
aportó más precisiones: "Los problemas de conectividad se deben, entre
otras cuestiones, a dos factores fundamentales: la mayor cantidad de
dispositivos conectados a la red y las pocas posibilidades de ampliación con
las que se encuentran las compañías".
"Si por ejemplo las telefónicas pudiesen dar televisión,
eso haría que inviertan más en infraestructura. Y los cableros también se
verían obligados a desembolsar más para no perder mercado", aseguró este
experto del sector a iProfesional.
Para Carrier, la desmejora que exhibe el servicio responde
también al envejecimiento de la tecnología instalada para brindar conectividad.
"Los cables se van degradando. La obsolescencia del sistema
hace que el servicio ofrezca una velocidad menor a la que podría dar o funcione
con interrupciones. Si bien las compañías han hecho avances para acercar la
fibra óptica al hogar, lo cierto es que en la mayoría de los casos se sigue
usando la tecnología más vieja", dijo.
Los analistas coinciden en destacar que la combinación de una
infraestructura que se va deteriorando, en contraposición a un nivel de consumo
que va en permanente ascenso, hace que la conectividad a Internet vaya quedando
más condicionada día a día.
"En casos como el de Cablevisión, la velocidad de
navegación está supeditada a cuánta gente está conectada en el mismo momento a
la misma red. Todos toman ancho de banda del mismo cable y eso explica el
porqué de un servicio deficiente", remarcó.
Conectividad ampliada
Gonzalo Hita, gerente comercial de Cablevisión, indicó que
"el consumo de ancho de banda por cliente crece a razón de un 50%
interanual".
Esto, debido -entre otras cosas- a la mayor cantidad de
dispositivos y a un tráfico de videos e imágenes que no se detiene.
A contramano de esta creciente demanda que se registra en la
Argentina, la calidad del servicio deja bastante que desear si se la compara
con lo que sucede en la región y en el mundo.
En efecto, la velocidad estándar de navegación en el país es
una de las más lentas a nivel global, con 5,09 megabits por segundo (Mbps)
promedio de descarga, ocupando el lugar 104 en el ranking de mediciones, siendo
superado en América del Sur por Ecuador, Brasil, Uruguay y Chile, entre otros.
El dato surge de un comparativo global que mide la tasa de
descarga de la red de unas 180 naciones que anualmente se difunde bajo el
nombre de Net Index, un indicador confeccionado por Ookla, empresa
norteamericana que elabora métricas de conectividad.
"En el mercado de Internet domiciliario se hace
referencia a paquetes de 3 o 6 megas de velocidad, pero la misma no está
respaldada ni garantizada en todo momento. Depende de la simultaneidad de
usuarios que estén utilizando el servicio en cada horario", sostuvo un
ejecutivo de uno de los principales proveedores de conectividad.
La lista mundial la lidera Hong Kong (61,76 Mbps), seguido
por Singapur (42,96) y Andorra (41,19).
La velocidad de conexión promedio de la Argentina es superada
en América latina por la de Uruguay (puesto 37), Chile (62), México (60), y
Brasil (75).
En el interior las deficiencias en el servicio son mayores
respecto de Capital Federal. Y estas complicaciones son seguidas de cerca por
especialistas provinciales.
Sebastián Meyer, experto en temas informáticos e integrante
de la mendocina Fundación IDR, comparó los paquetes domiciliarios y el servicio
que ofrecen las empresas.
"El tope que te dan es de 3 o 6 megas, pero el mínimo
que te garantizan está muy alejado de ese tope. Ocurre que del servidor salen
los 6 Mbps de velocidad de descarga, pero lo que le llega al usuario depende
mucho de la gente que esté conectada al mismo tiempo", afirmó.
Y agregó: "Si navegás a la madrugada, la velocidad va a
ser alta y estará más cerca del tope respecto de otros momentos del día. La
peor hora para navegar es de 12 a 13 horas. Es el momento en que más se
resiente", destacó.
En 2011, Argentina ocupaba en Net Index el lugar 90 con una
velocidad de acceso de 3,16 megabits por segundo. Es decir que en poco tiempo
la calidad del servicio que ofrecen los proveedores de Internet se redujo
haciendo que el país cayera 14 puestos.
Esto descenso cobra mayor relevancia si se tiene en cuenta
que los clientes requieren cada vez de una mayor rapidez de banda ancha, habida
cuenta de que hoy día más del 50% del uso de los celulares está dado por el
consumo de datos.
Precios para arriba
En simultáneo con una conectividad que está lejos de
evolucionar a la par de la de otros países de la región, el servicio de
Internet en la Argentina tiene la particularidad de ser uno de los más caros
del vecindario.
Así lo confirma la cuarta edición del informe "El precio
de la conectividad en América latina y el Caribe", a cargo del
especialista Hernán Galperín, investigador de la Universidad de San Andrés
(Udesa) y del Conicet.
"Si se compara en dólares corrientes el gasto mínimo que
debe realizar un hogar para abonarse al servicio de acceso a Internet de banda
ancha fija, la Argentina es el segundo país entre los más caros de América
latina, sólo superado por México", expone el trabajo.
El plan más barato de Internet en el segundo trimestre del
año promedió los 25,8 dólares, muy por encima del promedio regional de u$s18,7.
Si el análisis de precios se hace usando el tipo de cambio
ajustado por el criterio de paridad de poder de compra (PPP, en inglés) -que
elimina posibles distorsiones en los valores nominales de las monedas- la
Argentina pasa a ser el país más caro de toda la zona.
Medido de esta forma ese abono sube hasta u$s56,6, contra los
u$s31,7 del promedio regional. Brasil, Uruguay, Colombia y Chile, entre otros
países, se ubican por debajo de esa cifra.
"En promedio, el gasto mínimo de los hogares
latinoamericanos para conectarse se redujo a una tasa anual de 4% entre 2010 y
2013, mientras que en la Argentina, medido en dólares corrientes, se incrementó
en el mismo período al 4% anual", detalla el trabajo.
Una "banda" muy cara
En cuanto a banda ancha móvil para PC o dispositivos
similares mediante modem USB, el panorama tampoco es favorable.
"Si se consideran los abonos mensuales pospagos que
permiten al menos 1 giga de descarga de datos, la Argentina se ubica segunda
entre los mercados más caros, por detrás de Ecuador y 62% por sobre el promedio
general", precisa el estudio.
En otro apartado, el informe expone que "la falta de
inversiones en infraestructura de acceso fijo en el país se ve reflejada en la
limitada oferta de planes de muy alta velocidad en el mercado
residencial", sostiene el trabajo.
Por estos días, la velocidad máxima de conexión ofrecida (30
megas), está por debajo del promedio regional (54 megas).
Brasil lidera con más de 200 megas, seguido de Chile y
Uruguay, con 120 megas, y México, con 100 megas.
"Esto refleja claramente el déficit de inversión que hay
en infraestructura de banda ancha fija. Hasta hace unos años la Argentina
estaba entre los líderes regionales en provisión de acceso a Internet. Hoy
hemos quedado claramente rezagados", concluye la investigación.
Fuente:http://www.iprofesional.com/notas/170575-Se-cort-Internet-por-qu-el-acceso-se-interrumpe-cada-vez-ms-con-precios-que-no-paran-de-subir