Comenzó la campaña de cara al 27 de octubre y la calle comenzó a hablar de lo que favorece a cada candidato o no, sobre todo en el caso de aquellas figuras que son un mal recuerdo para el pueblo.
Precisamente la pregunta que motiva este análisis es si José Perea, ex intendente y ex Senador de Andalgalá, hoy como en una especie de jefe de campaña del candidato a intendente Miguel Morales, condiciona su imagen y aparece como su mochila más pesada en esta contienda electoral.
El recuerdo de Perea es no sólo una gestión que gastó más de ochenta millones en obras que no se hicieron, teniendo en cuenta que ese monto en los años 2007/08/09 eran una verdadera fortuna, por nombrar algunas como el Arroyo del Huayco, La Hostería Municipal, el Wifi Inalámbrico, el desarenador de la Toma (aún sin terminar), el tinglado del centro Vecinal de Choya que se cayó en la primera nevada, entre otras que no se terminaron pero que sí se gastaron presupuestariamente, advirtiendo que aún la Justicia sigue esperando las explicaciones de Perea.
¿Es cierto que con Morales volvería Perea? Una pregunta que muchos se hicieron al momento de votar en las PASO y todo hace parecer que en las elecciones de octubre primará el mismo razonamiento para aquellos que no votaron a Miguel Morales, un hombre que nació como empresario de la mano de José Perea.
¿Olvidamos fácilmente a aquellos políticos que estafaron al pueblo con falsas promesas de progreso y que terminaron dejando una ciudad en ruinas? Por el bien de nuestro pueblo, esperemos que no.
Lo triste de todo esto no es que Morales fue producto de José Perea y uno de sus máximos defensores, lo más triste es que cuando el pueblo fue el único estafado por las políticas desastrosas del ex intendente peronista, Morales aplaudía.
