Como ya se venía visualizando en relatos anteriores el quiebre de la Renovación Peronista de Andalgalá y en cuyo sentido está fuertemente anclado en el presente donde la Renovación no pudo recuperarse de los divisionismo antagónicos, efectuados por sus dos que dicen ser los referentes del espacio. El litigio de las memorias con la historia se zanja en el carácter subjetivo de tantos testimonios que ambos sujetos dejan mucho que hablar ante una sociedad cansada de mentiras y engaños.
Oscar Chayle y Raúl Ramírez, quienes estuvieron midiéndose en todo momento, erraron el camino y el verdadero sentido de lo que tendría que haber sido el espacio de Renovación. Son los responsables directos de cambiar las modalidades y quitar la identidad que se pretendía darle al esquema desde la Capital. El egoísmo pudo más que la unión, en ningún momento tuvieron la voluntad de acoplar al espacio, dirigencia de peso y hacerlo más amplio y poder fortalecer la vía que conduzca al éxito. Hoy son militantes aquellos sacados de las tribunas y por cartelear en fotos de dos fin de semana mezclado una olla de chocolate y rodeados de algunos personajes, se los premia con la estrellita de buenos dirigentes y militantes. Como salidos de una fábrica que militar es cosas de días.
El mayor desvelo de Chayle y Ramírez está marcado por la sed de poder. Como asignatura pendiente de ambos lograr ser candidatos sin importar pisar cabezas y dejar dirigentes importantes de lado a merced de otros espacios.
En el fracaso del intento por ser un espacios fresco como alternativa, que se produjo por la incapacidad de quienes encabezan la representación de la Renovación Peronista en Andalgalá, no deja más que al descubierto el hilo fino de la cuestión y a punto de cortarse.
La pregunta es quienes son la Renovación Peronista de Andalgalá? Ramírez o Chayle? Los cuales son como dueños de la verdad y la palabra quisieron amontonar los costales para sus molinos y descuidaron la estructura del espacio donde la fragmentación del mismo fue inevitable. Seguramente la derrota electoral será la mochila que deberán cargar.
La centralidad del poder y los votos residen en los dirigentes de años y no de los que se hacen de la noche a la mañana.
Ahora se prepara el escenario con Guillermo Haddad quien se encuentra en medio de la tirantez y quien manifestó no estar en favor ni en contra de ninguno, más claro imposible el Precandidato a Intendente, el cual no sabe quién es la Renovación Peronista de Andalgalá y se inclina a obtener el guiño de la Gobernadora para poder ser el candidato del Peronismo. Aunque todavía no está claro que pasara, lo que sí queda al descubierto que están divididos y se rodearon de saltarines que van donde más calienta el sol.
"Ana Torres por ejemplo que se pasó de la Renovación Peronista al espacio de Miguel Gutiérrez pero mientras seguía en la Renovación" volvió a mostrarse en la Renovación pero todos saben que trabaja para Gutiérrez. En definitiva no se le entiende y es poco creíble no solo por esto sino por sus antecedentes en el hogar de ancianos.
Triste pero cierto que la Renovación en Andalgalá no pudo lograr sus objetivos por que se equivocó en poner al frente a dos dirigentes que intentan ser políticos. Que van a capital y dicen ser los salvadores del Peronismo local. Venden lo que más les conviene y lo raro es que en capital les salen comparando lo que ofrecen. Chayle por un lado y Ramírez por el otro, ambos en pleno almuerzo con la Gobernadora y Funcionarios Provinciales entre otros, mostraron sus ansias de querer ser y de poder, al pelearse al frente de dirigentes por los lugares en el armado del partido Peronista local. Insultos iban y venían, la cosa que ahí quedó claro quiénes son verdaderamente.