La querella
solicitará su inmediata detención
Es
el caso de abuso en donde está imputado un sacerdote en Andalgalá. La querella
realizaría el pedido.
El
abogado Enrique Lilljedahl (hijo) representa desde el viernes pasado a la
familia del adolescente que denunció al sacerdote de Andalgalá por abuso. El abogado
se constituyo como querellante y, según trascendidos, solicitaría la prisión
del párroco.
Tras
constituirse como querellante particular en representación del menor a través
de la madre, el letrado comenzó a inmiscuirse en el estado de la causa.
En
un breve diálogo con este diario y al consultarle puntualmente sobre los
elementos de pruebas con los que cuenta brindó su informe.
Explicó
que del informe "surgió que a dos años de haber sucedido los hechos no se
pudieron constatar lesiones, pero se sobreentiende, porque la medicina forense
así lo estipula, que el ano es un músculo que se reconstituye y que no exhibe
una secuela permanente".
Asimismo,
puntualizó que lo "concluyente en la causa es la Cámara Gessel realizada
al menor y el informe psicológico que respalda los dichos del adolescente
respecto a los supuestos abusos y ultrajes".
En
tanto señaló que, además de la Cámara Gesell, existirían algunos testimonios
que refrendarían el trato que tenía el sacerdote con el adolescente, en virtud
de los ataques sufridos por éste último.
En
esta línea, y luego de que el viernes pasado se hiciera cargo de la querella,
el abogado analizaría, en el transcurso de esta semana, solicitar un cambio de
calificación legal de la causa.
En
consecuencia, la defensa solicitaría la inminente detención del cura párroco de
La Perla del oeste.
La causa
La
causa que tiene como imputado al sacerdote Renato Rasgido es investigada por la
fiscal Marta Nieva quien ordenó una pericia psiquiátrica para el sacerdote.
Rasgido
se encuentra imputado de los delitos de "abuso sexual simple",
"abuso sexual simple en grado de tentativa" y dos hechos de
"abuso sexual con acceso carnal", todos calificados por su condición
de sacerdote de la supuesta víctima.
Las
imputaciones se realizaron bastante tiempo después de la denuncia tras los
cambios de diferentes fiscales. El hecho salió a la luz hace dos meses cuando
una mujer denunció en la fiscalía de Andalgalá que su hijo fue víctima de
abusos por parte del sacerdote y que se habrían iniciado en 2012.
El
sacerdote se encuentra ahora apartado de sus actividades y con restricciones.