Mujer sacó
préstamos a nombre de 28 personas y ahora irá a juicio
La acusada poseía un local de venta de motos en Andalgalá y allí obtenía los documentos para tramitar los créditos.
Una mujer será enjuiciada, acusada de llevar a cabo 28 hechos de estafas, en los que sacaba préstamos a nombre de clientes que se acercaban a comprarle una motocicleta. La acusada poseía un local de venta de motos en Andalgalá y allí obtenía los documentos para tramitar los créditos.
Los hechos comenzaron a ser denunciados en 2012, pero en los dos años siguientes se sumaron decenas de damnificados que también pedían asistencia de la Justicia por haber sido engañados en su buena fe por Ana Lucía Chanampa, de 32 años.
La fiscalía de la Sexta Circunscripción Judicial con asiento en nuestro departamento, a cargo de la fiscal Martha Graciela Nieva, resolvió dar por concluida la investigación preparatoria en su contra y que un tribunal penal la juzgue. Se le endilgan acciones típicas de "estafa”, "retención indebida”, "estafa en grado de tentativa” y "estafa y retención indebida en concurso ideal”.
La mujer poseía un local comercial dedicado a la venta de motos en la calle Pérez de Zurita. Allí obtenía las copias de los DNI, recibos de sueldo y boletas de impuestos de clientes y potenciales clientes y a continuación, solicitaba préstamos en el Banco Columbia, cuya sede se encuentra en esta capital.
Los damnificados lógicamente nunca veían ese dinero, ya sea que compren o no una motocicleta, lo que a la larga les traía serios problemas económicos y afectaciones de firmas.
De acuerdo a la investigación, en algunos casos en los que se sintió acorralada por personas que descubrieron su engaño, la mujer pagó algunas de las cuotas de los préstamos, pero eventualmente fue "desapareciendo” de la localidad.
Luego de dejar de concurrir a la concesionaria, iba casa por casa ofreciendo los vehículos a las personas y luego los estafaba.
La fiscal Nieva envió oficios a los fines de que la entidad bancaria deje de perseguir a los damnificados mediante intimaciones, ya que los trámites para un préstamo deben ser personales. También se solicitó que los denunciantes sean removidos del veraz.
Además, se enviaron oficios a la fiscalía penal para indagar sobre la irregularidad en la emisión de los préstamos.
Se pudo conocer que la mayoría de los damnificados eran jubilados con escasos recursos, quienes en algunos casos debieron afrontar gastos por préstamos, tarjetas de créditos que nunca solicitaron y para colmo, nunca lograron conseguir las motocicletas que intentaban comprar.
A causa de la importante cantidad de denuncias en contra de la mujer, la fiscalía debió realizar una minuciosa investigación y recolección de documentación probatoria.