Recta final para la
Championship y el Mundial 2015
El plantel del seleccionado trabaja en Sidney enfocado en un año particularmente exigente. Matías Alemanno contó sus sensaciones desde el búnker albiceleste.
El Rugby Championship y el Mundial de Inglaterra están resaltados en un calendario que se presume muy exigente. En 16 días se producirá el debut en el Cuatro Naciones, nada menos que ante los All Blacks, para lo cual el cuerpo técnico diagramó una pretemporada íntegramente en Australia.
Se descartó el Exos Athletes Performance, el centro de alto rendimiento en la Florida, para realizar un acondicionamiento “a nuestra manera”, como lo señaló un integrante de la delegación.
En jornadas de doble y triple turno, el plantel se entrena en las instalaciones del Saint Joseph College, un colegio secundario ubicado en Hunters Hills, en New South Wales.
El jueves de la semana que viene habrá un amistoso ante Randwick Rugby Club, mientras que el sábado 11 viajará a Christchurch para jugar con los All Blacks. El calendario del Rugby Championship comprende sólo tres partidos: el mencionado ante Nueva Zelanda; ante Australia, el 25 en Mendoza, y el 8 de agosto ante Sudáfrica (ante los Springboks habrá un test match una semana después en Buenos Aires).
“La preparación será diferente a cómo venía siendo porque tenemos partidos en poco tiempo. Los jugadores que vienen de Europa tienen un trabajo físico más elevado, por lo que en ese aspecto serán rutinas más personalizadas. En lo que respecta al rugby trabajarán todos a la par porque en breve jugamos con los All Blacks. A ese partido lo afrontaremos con un plantel de 28 jugadores, por lo que el resto regresará al país y continuará entrenando en Argentina”, explicó el entrenador Daniel Hourcade.
“Es una etapa de preparación, la idea es llegar de la mejor manera al Mundial, y quizás en éstos dos primeros partidos vamos a alternar dependiendo de los minutos que tiene cada uno. Los partidos ante Sudáfrica quizá sí ya serán encarados con el equipo ya pensando más en el Mundial”, agregó.
Preparación
El PF de Los Pumas y actual Director Nacional de Rugby de la UAR, Martín Mackey, explicó en qué consiste la pretemporada. “Cuando íbamos a Pensacola realizábamos dos semanas de preparación física y pocos minutos de rugby. Teníamos seis semanas antes del primer partido del Rugby Championship. Este año solo tenemos 3 semanas”, dijo.
“Por la mañana se realizan bloques de técnica de carrera de 30 minutos, luego rugby de alta, mediana o baja intensidad, dependiendo del día donde se realizan bloques de destrezas, plan de juego, line, scrum o juego de backs. Por la tarde, el grupo se divide en dos para ir al gimnasio, donde los planes tienen en cuenta: la cantidad de partidos que jugo cada jugador, si deben perder tejido graso o ganar masa muscular y ejercicios correctivos”, agregó.
Uno de los aspectos en los que se hace mayor énfasis es en las destrezas. “Buscamos trabajar en aquellos aspectos que consideramos que están fallando, y que en definitiva atentan con el buen desarrollo del plan de juego que queremos llevar a cabo. En cada partido o entrenamiento identificamos los errores que se cometen, y en base a eso adaptamos los ejercicios, con el objetivo de que ese gesto técnico que quizás está saliendo de manera incorrecta, sea corregido”, explicó Germán Fernández, uno de los entrenadores.
Matías Alemanno, el único cordobés en el plantel, se muestra feliz de vivir por segunda vez una preparación semejante. “Lo vivo muy contento. Trato de disfrutar a full cada momento”, le contó a Mundo D el segunda línea de La Tablada desde el hotel Pullman Hyde Park.
“Se labura mucho, destrezas, físico, todo. El Championship es lo más importante a corto plazo. Después, se pensará en otra cosa. La idea es ir y desplegar un buen nivel, que el equipo tome confianza, realice un buen juego y, por supuesto, sacar resultados. Ya Los Pumas no van a torneos a participar sino a competir con la idea de ganar”, agregó.
Alemanno, que comparte la habitación con el hooker Julián Montoya, señaló que no siente presión por demostrar sus cualidades. Aunque eso sí, no se relaja. “Presión no, pero sí siento lo que sienten todos, que no podés sacar el pie del acelerador. Si en cada entrenamiento o en cada partido no dejás el alma está difícil. Hay mucha competencia y una base muy amplia de jugadores que están a la misma altura. Hay que estar muy atento y hacer las cosas perfectas porque el nivel de competencia es altísimo y cualquiera puede superar a cualquiera al momento de dar la lista”, señaló el jugador que encarna la esperanza de Córdoba de tener un representante en el Mundial.
