Francisco pidió
por la paz mundial e instó a la reconciliación
Fue
durante su mensaje de Pascua, ante más de 150 mil fieles. Pidió a Cristo acabar
con el virus del ébola y pidió el fin de otros conflictos internacionales
como
los de Ucrania y Siria. El mensaje también abordó la problemática del hambre y
de los inmigrantes.
El
papa Francisco pidió hoy durante su mensaje de Pascua la pacificación de todos
los conflictos de la tierra, "pequeños o grandes, antiguos o recientes",
e instó a la reconciliación de las partes enfrentadas en Venezuela, entre otros
conflictos.
Así
lo solicitó el pontífice desde la logia central de la basílica vaticana, a la
que se asomó para leer este mensaje pascual e imponer, posteriormente, la
bendición "urbi et orbi" con motivo del Domingo de Resurrección.
Durante
su alocución, ante más de 150.000 fieles congregados en las inmediaciones del
templo, mencionó los conflictos que se viven en países como Ucrania, Irak, la
República Centroafricana o Sudán del Sur y reclamó el fin de las tensiones
entre israelíes y palestinos y de los ataques terroristas en Nigeria.
Asimismo,
pidió a Cristo que interceda para acabar con la epidemia de ébola que se vive
en países africanos como Sierra Leona, Libera y Guinea.
Venezuela
Sobre
Venezuela el pontífice llamó a la "concordia" entre las partes, el
Gobierno de Nicolás Maduro y sus opositores, que ya han solicitado la
participación de la Santa Sede en sus negociaciones.
"Que
las almas se encaminen a la reconciliación y a la concordia fraterna en
Venezuela", pidió el primer papa latinoamericano.
Por
otro lado, el obispo de Roma hizo especial hincapié en el conflicto de Siria y
rezó por la liberación de los sacerdotes secuestrados y por todos aquellos que
sufren persecución por profesar una fe.
"Te
suplicamos, Señor, por Siria, la amada Siria, para que todos los que sufren las
consecuencias puedan recibir la suficiente ayuda humanitaria y para que las
partes en causa no usen más la fuerza para sembrar la muerte", aseveró.
No
obstante, no solo criticó la guerra sino que el papa se dirigió, de nuevo, a
los más débiles, a los que sufren violencia o pasan hambre por culpa de los
desperdicios.
"Ayúdanos
Señor a derrotar la plaga del hambre, agravada por los conflictos y por los
inmensos desperdicios de los que, a menudo, somos cómplices (...). Ayúdanos
también a proteger a los indefensos, sobre todo a los niños, las mujeres y los
ancianos, tantas veces objeto de abandono", afirmó.
Inmigrantes
Por
último, también se encomendó a Cristo para que calme a todos aquellos que
"han dejado su propia tierra para emigrar en busca de lugares donde poder
esperar un futuro mejor".
"Para
todos los pueblos de la Tierra te pedimos, Señor, tú que has vencido a la
muerte, danos tu vida y tu paz", solicitó el pontífice.
Con
estas palabras y con la posterior bendición "Urbi et orbi", Bergoglio
puso fin a las ceremonias de la Semana Santa, la segunda que preside desde la
silla del Apóstol San Pedro.