El Vaticano
suspendió a un cura Cordobés acusado de abusar
El
Arzobispado de Córdoba apartó por diez años de su cargo al sacerdote Luis
Alberto Bergliaffa luego de que fuera "confirmado con certeza moral
suficiente" que atacó sexualmente a una niña.
La
decisión la tomó el arzobispo de la Provincia, monseñor Carlos Ñañez, en nombre
de la Santa Sede, e implica la prohibición del cura sancionado de todo
ejercicio público del ministerio sacerdotal durante 10 años.
El
Arzobispado de Córdoba informó que fue "confirmada con certeza moral
suficiente la sentencia que ha encontrado culpable al Pbro. Luis Alberto
Bergliaffa del delito de abuso sexual de una menor". La condena es del 10
de enero pero trascendió estos días.
Pese
a la suspensión, Bergliaffa no afronta ningún proceso judicial, ya que la
Iglesia no se constituyó en denunciante porque se trata de un delito que sólo
puede ser denunciado por el agraviado, sus padres o tutores. "Hasta ahora
no tenemos noticia de que la familia de la víctima haya hecho la denuncia penal
ante el Estado", explicó el vicario judicial del Arzobispado provincial,
el padre Dante Simón.
La
Iglesia cordobesa reiteró que "el hecho fue denunciado ante las
autoridades eclesiásticas, pero como los delitos de estas características sólo
pueden ser denunciados por el agraviado o sus padres o tutores, según establece
el artículo 72 del Código Penal de la Nación, la Iglesia no se constituyó en
denunciante ante ese fuero judicial, sí lo hizo de acuerdo con la ley de la
Iglesia contenida en el Código del Derecho Canónico".
Simón,
además destacó que la sentencia "es definitiva" y está "dentro
del proceso canónico iniciado hace tres años por Arzobispado de Córdoba".
El
vicario judicial además destacó que Bergliaffa había apelado la decisión, pero
"ante la apelación, la Santa Sede se expidió y le prohibió el ejercicio
público del ministerio sacerdotal".
Según
publica el sitio web de La Voz del Interior, desde el arzobispado de Córdoba
informaron que Bergliaffa "sigue siendo cura, pero no puede celebrar misa
públicamente".
Bergliaffa
se desempeñaba en la parroquia Nuestra Señora de Fátima, en el barrio Matienzo
de la ciudad de Córdoba, y el caso comenzó a ser investigado hace tres años.