EL QUE CALLA...
OTORGA?
La
ola de inseguridad da claro signos de tener un crecimiento sostenido e
incontrolable en estos últimos tiempos. ¿Por qué lo decimos?.
Una
cantidad considerables de casos de delincuencia e inseguridad no trascienden y
esto no es un hecho casual. Muy por el contrario. Forma parte de una actitud sistemática
que intenta soslayar u ocultar lo que a todas luces desde la comunidad vemos.
La delincuencia no solamente no ha descendido en sus elevados índices, sino
que, día a día aumenta en forma alarmante, en cantidad y maldad.
Desde
hace mucho tiempo la comisaria departamental, niega, soslaya u oculta hechos de
inseguridad que ocurren a diario y en algunos casos se niegan a recibir denuncias por estos tipos de
hechos. Tenemos claros ejemplos de esto. Durante el pasado 30 de enero Graciana
Martínez una trabajadora andalgalense sufrió un hecho de inseguridad, cuando
personas desconocidas le sustrajeron de su automóvil varios elementos
personales, Martínez comento en una red social lo sucedido e hizo saber su disconformidad
ante la atención de personal policial, comento que el hecho habría ocurrido
entre las 14 y 15 horas y la denuncia fue recibida 5 horas después.
Solamente
por mencionas otro caso lo ocurrido a un importante farmacéutico del medio a
quien le sustrajeron durante el fin de semana una suma aproximada de $37.000.
Hechos delictivos, como el que mencionamos, que no fueron informados por
personal policial, fueron corroborados por los mismos damnificados que al
tratar de denunciar y aportar datos para que la investigación avance y se
esclarezca, varios días después, se dan con la irritante realidad de que no hay
datos positivos en cuanto a la investigación.
Tapar,
negar, ignorar que un hecho delictivo a ocurrido no solo no aporta una solución
al problema de fondo sino que tristemente muestra una miopía institucional de
nuestras fuerzas judiciales y de orden, que lejos de calmar a la ciudadanía,
crispa los nervios de quienes sufren estas situaciones de inseguridad, y de
aquellos que tenemos la función de informar y comunicar socialmente con
responsabilidad y honestidad.