Declaró durante tres ante el juez Ríos y denunció que la
policía "lo apretó" para incriminarse. Según su abogado "hubo
momentos de mucha tensión".
El portero Jorge Mangeri, único detenido por el homicidio de
Angeles Rawson, declaró hoy ante el juez de instrucción Javier Ríos en el
Palacio de Tribunales y negó haber matado a la joven y reiteró que se hizo
cargo del hecho porque lo "apretó" la Policía.
Así lo afirmó su abogado Marcelo Biondi tras la indagatoria
del juez que culminó a las 16.30. Mangeri había ingresado tres horas antes
esposado y escoltado por personal del Servicio Penitenciario Federal, al
Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción Nº 17, ubicado en el quinto piso
de los Tribunales, donde fue indagado.
El portero acusó al juez de haberle plantado el ADN que lo
involucró en el hecho y le dijo que la causa estaba "armada".
"Dijo que le armaron una causa", aseguró esta tarde el abogado Miguel
Ángel Pierri, defensor del portero.
Pierri aseguró que “contó que la vio a Angeles muy temprano,
cuando se fue a la escuela, a su madre y a Sergio Opatowski y después no vio
más a nadie”. El abogado aseguró que el portero “citó a propietarios con
departamento y letra” del edificio de Ravignani 2360 y "sin quererlo
desmintió a otros testigos", lo cual -a criterio del defensor-
"acreditan una profunda investigación".
El portero había llegado poco después de las 8 al Palacio de
Tribunales para declarar por primera vez ante el juez de la causa ante las
pruebas que lo incriminan. Pierri, aseguró antes de la declaración que su
cliente tenía "mucho para decir” y que contestaría “todas las preguntas
que le haga el juez".
Sin embargo, el portero no contestó muchas de las preguntas.
Según otro de sus abogados, Marcelo Biondi, Mangeri no quiso responder algunas
preguntas por “las distintas pruebas que se aportó a la causa”.
Antes de la declaración del portero, Biondi había
considerado que “no hay ninguna prueba que pueda llevar a un móvil sexual como
se especula”. También afirmó que en la causa hay "irregularidades
graves" y consideró que "van a tener que ser revisadas".
La alusión tenía que ver con las pruebas genéticas
realizadas en material hallado bajo las uñas de Angeles Rawson y que dieron
como dato que pertenecían a Mangeri. Según Biondi esas pruebas podrían haber
sufrido alguna contaminación. Y por eso sostuvo que habrá que determinar
"si esas pericias están bien o mal hechas".
"Puede ser que haya errores humanos, que no dejan de
ser errores graves", afirmó Biondi en las escalinatas de Tribunales ante
la consulta de los periodistas. Y cuando le preguntaron cuáles serían las
declaraciones que haría el portero y que iban a sacudir Tribunales, sólo
señaló: “Él va a clamar por su inocencia”.
La audiencia fue encabezada por el propio magistrado Ríos,
su secretario Pablo Cina, y también participaron la fiscal María Paula Asaro,
el abogado querellante Pablo Lanusse y los defensores antes nombrados: Pierri y
Biondi.
Esta fue la cuarta indagatoria del portero, la segunda ante
Ríos y la primera que se realiza a pedido del propio imputado. En las dos
primeras, ocurridas el 15 y el 17 de junio, el acusado fue indagado por el juez
subrogante Roberto Ponce, asistido por el defensor oficial Carlos Garay y se
negó a declarar.
La tercera fue el 1 de julio ante el juez natural de la
causa, Ríos, ante quien Mangeri, ya con el asesoramiento de los abogados
particulares, también se negó a contestar preguntas sobre el crimen pero
denunció que fue "hostigado" y "apretado" dentro de la
fiscalía por personal policial para que se autoincriminara.
Angeles Rawson desapareció el 10 de junio pasado en el
barrio porteño de Palermo cuando regresaba de una clase de educación física. Al
día siguiente su cadáver fue hallado en la planta de tratamiento de residuos de
la CEAMSE de la localidad bonaerense de José León Suárez, por lo que se
estableció que la habían tirado a la basura.