El profesional era el director del hospital de Aconquija y único médico. Llegó a estar 90 días de guardia.
Sara Reinoso, viuda del médico Ángel Vega Saragusti, que se encontraba con licencia por stress laboral y estaba en tratamiento cuando falleció días pasados, aseguró que el ministerio de Salud “no escuchó los numerosos pedidos de su marido para que pusieran un reemplazo que le permitiera descansar”.
Opinó que “si esto se hubiera solucionado cuando él lo pidió no estaríamos hablando de esto en este momento. Él estaba como médico en el hospital de Aconquija, fue muy permisivo, empezó teniendo guardias de 15 días, convengamos que un médico no puede tener guardias de tantos días, estaba nombrado como director del hospital, pero era médico único. Las cosas fueron empeorando porque primero tenía un reemplazo cada 15 días, después cada 20, y el 28 de diciembre del año pasado entró a trabajar y salió en febrero o marzo. Recién pudo volver a la ciudad porque entonces llegó un médico para que lo cubriera”.
Reinoso recordó que “ese reemplazo llegó porque él tuvo un colapso y su psicólogo viajó de la Capital a Aconquija y lo atendió y le dijo que necesitaba un descanso. Por ese motivo es que después de 90 días tuvo un reemplazo y así fue pasando el tiempo y le prometieron que no iba a volver a pasar. Estaba muy cansado, yo viví con él allá y golpeaban a 4 de la mañana la puerta para que los atienda por cuestiones menores; estaba todo el día, mañana y tarde en el hospital o lo buscaban en la casa”.
La mujer comentó que “estuvo viviendo 5 meses en el hospital y después alquilamos una casa alejada del hospital, pero lo mismo lo iban a buscar. En ese tiempo hizo una nota al ministerio para que le buscaran reemplazo y como no hubo respuesta su psiquiatra le dio certificado médico por 15 días”.
Finalmente, Reinoso señaló que " Él venia con una licencia psiquiátrica, lo trataban mal (en el Ministerio), cada vez que se presentaba para ver que había pasado con sus notas. Se sintió muy avasallado".
El Ancasti