El 29 de abril
conmemoramos el Día Internacional de la Danza
El
Día Internacional de la Danza (International Dance Day) se celebra todos los
años el 29 de Abril. Fue establecido por el Comité de Danza del Instituto
Internacional del Teatro de la Unesco en 1982, a partir de la propuesta del
maestro ruso Piepor Gusev de Leningrado, de homenajear al gran innovador del
ballet clásico y creador del ballet moderno, el Coreógrafo Francés Jean Georges
Noverre, nacido el 29 de abril de 1727. La Celebración tiene por finalidad
atraer la atención sobre el arte de la danza y reunir a todos los géneros
dancísticos
El
Coreógrafo Sidi Larbi Cherkaoui, oriundo
de Amberes, Bélgica, en su mensaje con Motivo del Día Internacional de la Danza
2012, señala que “lo largo del tiempo, a través de los años, lo que permanece
es, ante todo, el arte. Aquello que el ser humano deja a sus herederos parece
ser, al fin y al cabo, arte, bien sea en forma de edificios, libros, pintura o
música. O movimiento o danza. En este sentido, pienso en la danza como en la
lección de historia más actual y más actualizada que existe, ya que está en
constante relación con su pasado más reciente y sólo puede ocurrir en el
presente
.
De
alguna manera, la danza no reconoce fronteras del mismo modo en que lo hacen
otras artes, incluso cuando ciertos estilos tratan de limitarse a sí mismos o
de trabajar dentro de un marco. El movimiento de la vida, su coreografía y su
necesidad de cambio constante entran en acción rápidamente permitiendo que
ciertos estilos se mezclen entre sí. Todos engranan de forma natural y la danza
se establece sólo en el espacio al que pertenece: el del presente siempre
cambiante. Creo que la danza es una de las formas de expresión más honestas que
existen y por eso debemos apreciarla y conservarla. Al movernos como otras
personas, al movernos con otras personas y al verles moverse, es como mejor
podemos sentir sus emociones, pensar sus pensamientos y conectarnos con su
energía. Es, quizás entonces, cuando mejor y más claramente podemos conocerles
y entenderles.
Me
gusta pensar en el espectáculo de danza como en una celebración de la
co-existencia, como una forma de dar y crear espacio y tiempo para los demás y
para nosotros mismos. Tendemos a olvidarlo, pero la belleza subyacente del
espectáculo en vivo reside, principalmente, en la convergencia de una masa de
personas, sentadas una al lado de la otra, compartiendo el mismo momento. No
hay nada de privado en ello, un espectáculo es una experiencia extremadamente
social. Todos nosotros reunidos por este ritual, que es nuestro vínculo con el
espectáculo, nuestro vínculo con el mismísimo presente.
En
este 2012, deseo a todo el mundo, mucha danza. No se trata de olvidar los
problemas del año 2011, sino muy al contrario, de enfrentarnos a ellos de forma
creativa, de bailar en torno a ellos para encontrar la manera de engranar con
los demás, con el mundo y con la vida convirtiéndonos en parte de su
interminable coreografía. Dancemos para encontrar la honestidad y transmitirla,
para reflejarla y celebrarla”.