Condenaron al
hijo de “El Malevo” Ferreyra a 14 años de prisión
Alain
Ferreyra y Alfredo Ibarra fueron hallados culpables del homicidio del cabo
Mario Sebastián Rodríguez y recibieron la misma pena.
Alain
Ferreyra tiene 26 años y fue condenado ayer a pasar 14 años tras las rejas por
el homicidio del cabo Mario Sebastián Rodríguez. El condenado es uno de los
hijos del polémico ex jefe de la Dirección General de Investigaciones de la
Policía, Mario “El Malevo” Ferreyra. El juicio oral comenzó el jueves pasado.
Y, en la tercera audiencia del debate, el tribunal de la Sala IV de la Cámara
Penal dictó una sentencia en la que consideró que Ferreyra fue un partícipe
necesario en la ejecución del crimen.
El
cabo Rodríguez murió por causa de las múltiples lesiones provocadas por una
bala calibre 22. Ese proyectil, según el veredicto de los jueces María del
Pilar Prieto, Dante Ibáñez y Emilio Páez de la Torre, fue disparado por el
cómplice de Ferreyra, Félix Alfredo Ibarra (22), que recibió la misma condena
del hijo de “El Malevo”.
El
tiroteo en el que resultó herido el policía ocurrió el 3 de diciembre de 2011.
Ese día, los ahora condenados intentaron asaltar un camión repartidor de
bebidas en Lavaisse al 2.600.
El
desarrollo del juicio fue complejo. La mayoría de los testigos que hablaron
ante el tribunal fueron reticentes cuando se les pidió que detallen cómo
sucedió el intento de robo. Los primeros en declarar fueron los tres empleados
que estaban trabajando en el camión al que atacaron los asaltantes. Pero los
operarios Héctor Tajan, Daniel Sueldo y Juan Herrera pocas precisiones pudieron
aportar al tribunal que trataba dilucidar cómo sucedió el tiroteo. Incluso, en
esa jornada, el juez Ibañez le preguntó a uno de estos empleados si había
recibido alguna amenaza antes de declarar en el juicio.
Los
policías que aprehendieron a Ferreyra a las pocas horas haberse cometido el
intento de robo, tampoco aportaron certezas y, en más de una ocasión, fueron
advertidos por la jueza Prieto, presidenta del tribunal, de que iban a ser
sancionados si persistían en su reticencia a declarar. En lo que coincidieron
los uniformados que detuvieron al hijo de “El Malevo”, fue en que le quitaron
un revólver calibre 38 con tres cartuchos usados y dos sin percutar.
Ante
esta situación, el trabajo de la fiscala Estela Giffoniello fue importante para
develar los hechos. Pero en la segunda jornada ocurrió algo inesperado. Los dos
imputados pidieron declarar ante los jueces y, mientras Ibarra acusaba a
Ferreyra de haberle disparado durante el tiroteo, este confesaba que había
salido a robar porque necesitaba pagar una deuda de $ 3.000 a unos usureros que
lo estaban amenazando. Además, el hijo de Ferreyra reconoció que había
disparado el revólver que le secuestraron y dijo: “salí a robar, pero nunca
tuve la intención de matar”.
El
trabajo de los defensores también fue complejo. Tanto que -en su alegato- el
defensor de Ferreyra, Manuel Ruiz, pidió una pena de 10 años para su cliente.
En contraparte el defensor Bernardo Torti pidió la absolución de Ibarra. Mario
Rodríguez, padre de la víctima, dijo estar disconforme con la sentencia y
adelantó que denunciará a miembros de la Policía aduciendo que el homicidio fue
una venganza.
Fuente:www.launiondigital.com.ar